Fortaleciendo el tratado sobre tortugas marinas

23 June 2015

Por Gladys Martínez

Apenas rompen el cascarón, las crías de tortuga marina asoman la cabeza con letargo para luego dirigirse rápidamente a esa vasta masa de agua salada. Son animales migratorios que nadan y anidan en territorios de diferentes países. Su sobrevivencia está en riesgo por la pesca no sostenible, el desarrollo inmobiliario inadecuadamente planificado, y los proyectos mineros en zonas costeras y marinas, entre otros factores.

En 2001 y para afrontar esas amenazas, se creó la Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas. El tratado internacional promueve la protección, conservación y recuperación de las poblaciones de tortuga marina. Del 24 al 26 de junio, en la Ciudad de México, los representantes de los Estados firmantes del tratado analizarán los logros y planes de trabajo de la Convención en la 7ª Conferencia de las Partes. AIDA estará presente abogando para que los Estados sigan cumpliendo sus obligaciones ante la Convención y asuman nuevos compromisos. 

La Convención cuenta actualmente con quince Estados Partes: Argentina, Belice, Brasil, Chile, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Países Bajos del Caribe, Perú, Uruguay y Venezuela. Está integrada además por 32 observadores acreditados, entre académicos y organizaciones no gubernamentales. Estos observadores pueden participar de las reuniones de los diferentes Comités Científicos y Consultivos de Expertos de la Convención.

Objetivos de la Conferencia

La 7ª Conferencia de las Partes de la Convención tiene previsto aprobar tres resoluciones clave:

  • Resolución sobre la conservación de la tortugas baula (Dermochelys Coriacea) del Pacífico Oriental.
  • Resolución sobre la conservación de la tortuga cabezona (Caretta Caretta).
  • Resolución sobre excepciones para la cosecha de subsistencia de huevos de tortuga Lepidochelys olivácea en Costa Rica. 

En la Conferencia también se revisará el cumplimiento de los Estados respecto de sus informes anuales, se presentará el plan de trabajo de la Secretaría, y se elegirá nuevos Presidente, Vicepresidente y Relator.

Nuestra contribución

La participación de AIDA buscará que los Estados:

  • Se comprometan a evitar amenazas a los hábitats de anidación de tortugas por proyectos de minería.
  • Continúen restringiendo y prohibiendo los desarrollos inmobiliarios que afectan las rutas que las tortugas marinas transitan.
  • Fortalezcan las medidas de pesca responsable y sin captura incidental (cuando las tortugas marinas son capturadas “por accidente” sin ser el objetivo de la pesca). 

Concentraremos nuestros esfuerzos en dar a conocer y promover medidas para frenar  los riesgos que el proyecto de minería marina Don Diego implica para la tortuga caguama y para el ecosistema marino en México.

En AIDA hemos trabajado desde 1998 por la firma de la Convención. Una campaña organizada por AIDA y otros defensores de la tortuga marina ayudó a conseguir las firmas necesarias para que el proceso de negociación continuara y para que la Convención entrara en vigencia. 

Hemos abogado con éxito ante Cortes y  tomadores de decisiones por la protección de las tortugas marinas en diferentes países de América Latina con base en las obligaciones adquiridas por los Estados bajo la Convención.

Como ejemplos de ello podemos mencionar que protegimos a la tortuga verde de la matanza ilegal en el Atlántico costarricense, evitamos la pérdida del hábitat de anidación de la tortuga baula y garantizamos que las tortugas carey y lora continúen disfrutando de uno de sus arrecifes de coral favoritos en Coiba Panamá.

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Sobre el autor

Gladys Martínez de Lemos

Retrato de Gladys Martínez de Lemos

Gladys Martínez es la directora ejecutiva de AIDA, trabajando desde San José, Costa Rica. Por ocho años, lideró el Programa de Biodiversidad Marina y Protección Costera. Gladys tiene una licenciatura en Derecho de la Universidad de Costa Rica y una maestría en Seguridad Ambiental y Paz de la Universidad de las Naciones Unidas para la Paz. Se formó además en administración de organizaciones sin fines de lucro en la Kellogg School of Management de la Northwestern University.

Costa Rica
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