Project

Foto: Manuel Victoria

El arrecife veracruzano: El más grande del Golfo de México

En el Golfo de México, 27 arrecifes de coral forman una cadena montañosa submarina que se extiende por kilómetros entre seis islas. Cientos de especies de peces de colores, pastos marinos, erizos y estrellas de mar, comparten los arrecifes con otras formas de vida. La pesca, el buceo deportivo y el turismo de playa prosperan a lo largo de la costa. Se trata del magnífico arrecife veracruzano, el ecosistema de coral más grande del Golfo.

En 1992, el gobierno de México declaró Área Natural Protegida al Sistema Arrecifal Veracruzano. En 2004, lo enlistó como Humedal de Importancia Internacional bajo la Convención Ramsar, un tratado para la protección de humedales, incluidos los arrecifes.

Pese a la relevancia reconocida del arrecife, en 2013, el gobierno redujo el tamaño del Área Natural Protegida y aprobó un proyecto de ampliación portuaria. Comunidades locales y organizaciones impugnaron los permisos ambientales del proyecto demandando la protección del derecho a un ambiente sano. 

El 9 de febrero de 2022, la Suprema Corte de Justicia de la Nación decidió de manera unánime que las autoridades violaron el derecho a un ambiente sano de residentes de Veracruz al autorizar la ampliación portuaria con base en una evaluación de impacto ambiental fragmentada. Esto implica que los permisos para el proyecto quedan inexistentes y que se de estudiar nuevamente los impactos del proyecto a la salud de los arrecifes, esta vez de manera integral, e incluso la viabilidad de la obra. 

El fallo es un precedente es histórico no sólo en México, sino para toda la región, al permitir el acceso a la justicia ambiental de las personas vecinas de un ecosistema afectado por un proyecto.

 

Partners:

Últimas Noticias


Arrecifes de coral, Océanos

Autoridad ambiental mexicana vulnera obligaciones internacionales con nuevo permiso para ampliación portuaria que amenaza al Sistema Arrecifal Veracruzano

En un escrito legal, AIDA y Earthjustice evidenciaron cómo la Secretaría de Medio Ambiente no reevaluó adecuadamente el impacto ambiental del proyecto en los arrecifes, declarados Patrimonio de la Humanidad, de acuerdo con los términos dispuestos por la Suprema Corte.   Ciudad de México, México. Las organizaciones internacionales AIDA (Asociación Interamerican para la Defensa del Ambiente) y Earthjustice presentaron hoy un escrito legal ante el Juzgado Quinto de Distrito de Veracruz con el fin de garantizar la protección del Sistema Arrecifal Veracruzano frente al proyecto de ampliación del puerto de Veracruz. Al autorizar nuevamente el proyecto, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) no solo incumplió un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, sino que también desconoció obligaciones internacionales del Estado mexicano en materia de protección del ambiente y los derechos humanos, incluido el derecho humano a un medio ambiente sano, garantizado en la Constitución mexicana. Así lo evidenciaron ambas organizaciones en el escrito legal (Amicus Curiae o "Amigo del Tribunal"). En él solicitan que el juzgado —que está a cargo de determinar si la sentencia de la SCJN se cumplió o no— establezca el desacato y obligue a la Semarnat a examinar de nuevo el proyecto con base en el procedimiento de evaluación de impacto ambiental requerido por el alto tribunal. "Las autoridades deben cumplir con la orden de la Suprema Corte y proteger este tesoro natural de México.  El derecho humano a un medio ambiente sano no puede ser ignorado", dijo Guillermo Zúñiga, originario de Veracruz y abogado de Earthjustice. "El arrecife no sólo alberga la mayor biodiversidad de especies en la región central del Golfo de México, sino que también ayuda a mitigar el impacto de marejadas y huracanes. Las personas que crecimos aquí y las que ahora tienen aquí su hogar conocemos el valor de este santuario donde la tierra y el mar armonizan en unidad". El 9 de febrero de 2022, residentes de Veracruz lograron una victoria ante la Suprema Corte en una acción de amparo interpuesta para defender el Sistema Arrecifal Veracruzano —el arrecife más grande del Golfo de México— y sus servicios ambientales frente al proyecto de ampliación del puerto de Veracruz. La Suprema Corte ordenó la revocación de los permisos para las obras al determinar que la Semarnat, al avalar el proyecto, violó el derecho al medio ambiente sano de las y los veracruzanos. Pese a la importancia ecológica, cultural y económica del Sistema Arrecifal Veracruzano, la autoridad ambiental había autorizado la ampliación portuaria de forma fragmentada, dividendo el proyecto en 15 fragmentos y diluyendo su verdadero impacto. Además, excluyó por completo de su análisis un arrecife no emergente ("La Loma") ubicado en el área del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano. En su fallo, la Suprema Corte ordenó a la autoridad ambiental reevaluar el proyecto de manera integral, holística y completa. Además, dispuso que la nueva evaluación se hiciera conforme los elementos que componen el derecho a un ambiente sano, así como los principios de prevención y precaución, consagrados en el derecho internacional. Y pidió también solicitar el apoyo del Consejo Nacional de Áreas Naturales Protegidas y del Comité Internacional de Humedales de la Convención Ramsar para diseñar un esquema de protección para el Sistema Arrecifal Veracruzano. "En este momento, el juzgado tiene la oportunidad de confirmar el efecto transformador del fallo de la Suprema Corte y sentar un precedente valioso para la protección real, no solo en papel, de los arrecifes veracruzanos y del derecho universal a un ambiente sano", señaló Sandra Moguel, abogada del Programa de Ecosistemas de AIDA. "Incluir a las autoridades internacionales de la Convención Ramsar implicaría fortalecer con conocimiento técnico y transparencia la evaluación de impacto ambiental del proyecto". Como se demuestra en el escrito, al otorgar un segundo permiso al proyecto —el 30 de diciembre de 2022— la Semarnat incumplió la sentencia de la Corte y las obligaciones del Estado mexicano porque: No requirió un nuevo estudio de impacto ambiental —obligatorio para proyectos de esta envergadura según el derecho internacional y la legislación nacional— para analizar los impactos acumulativos de todos los segmentos del proyecto original. Al contrario, la autoridad ambiental basó su evaluación en las manifestaciones originales deficientes. Aun así, dejó fuera de su análisis tres de los segmentos originales. No sometió su nueva evaluación a una consulta pública ni publicó información nueva sobre los impactos del proyecto antes de autorizarlo otra vez. De esta manera, desconoció los derechos de las personas de Veracruz a la participación pública y al acceso a información en la toma de decisiones en asuntos ambientales. Todavía no ha solicitado el apoyo del Consejo Nacional de Áreas Naturales Protegidas ni del Comité Internacional de Humedales. La participación de dicho comité es de particular importancia debido a su experiencia y conocimiento técnico en la protección de áreas protegidas y humedales.   El Sistema Arrecifal Veracruzano es Área Natural Protegida designada por legislación nacional, humedal de importancia internacional bajo la Convención Ramsar y Patrimonio de la Humanidad bajo la UNESCO.   AIDA es una organización internacional sin fines de lucro que lleva 25 años protegiendo el derecho humano a un ambiente sano en el continente americano. Earthjustice es la principal organización de derecho ambiental de interés público sin fines de lucro de Estados Unidos de América.  Su objetivo social como persona jurídica se enfoca en utilizar el poder de la ley y la fuerza de la asociación para proteger la salud de las personas, preservar sitios magníficos y la vida silvestre, promover la energía limpia y combatir el cambio climático.   Contactos de prensa Sandra Moguel, AIDA, [email protected], (español e inglés) Guillermo Zúñiga, Earthjustice, [email protected] (español) Kathryn McGrath, Earthjustice, [email protected] (inglés)  

Leer más

Arrecifes de coral

Campaña "#Arrecifes del Golfo: Cuna del mar" visibiliza la importancia biocultural de estos ecosistemas amenazados

En el Golfo de México hay un tesoro invisible y en riesgo. La industria de hidrocarburos amenaza al Corredor Arrecifal del Suroeste del Golfo de México. La subsistencia y economía de aproximadamente 40 mil personas pescadoras y sus familias, así como la cultura veracruzana dependen de los arrecifes.   La Red Corredor Arrecifal del Golfo de México lanzó hoy la campaña #Arrecifes del Golfo: Cuna del Mar, con el objetivo de visibilizar que la importancia ambiental, económica y sociocultural de esta zona depende de la salud y protección de los arrecifes, los cuales están en grave riesgo por la actividad humana y la crisis climática. El Golfo de México es una región con una enorme riqueza en biodiversidad, usualmente poco apreciada, cuyo altísimo valor ambiental ha hecho posible la alimentación, los ingresos económicos y la diversidad cultural de la que disfrutan sus habitantes y visitantes. Particularmente, el Corredor Arrecifal del Suroeste del Golfo de México (CASGM) es donde los pueblos que viven en la planicie costera de Veracruz han construido sus formas de vida y tradiciones. Con una extensión de 600 kilómetros, este importante corredor ecológico se extiende desde el sur de Tamaulipas hasta más allá de la desembocadura del río Tonalá en Tabasco. A pesar de ello, las prioridades económicas de los gobiernos han subordinado la protección de esta zona, prefiriendo las labores de extracción, exploración y transporte de hidrocarburos. Los arrecifes del Golfo de México también se han visto afectados por obras de infraestructura marítima, así como por el tráfico marítimo y la contaminación del mar por la falta de saneamiento en las cuencas hidrológicas. Veracruz ocupa el tercer lugar nacional en producción de petróleo crudo, el primer lugar en producción petroquímica básica con un 80% de la producción nacional y es la entidad federativa con el mayor número de campos de reservas remanentes. Más recientemente, obras de infraestructura como la ampliación del puerto de Veracruz, así como los proyectos Gasoducto Sur de Texas-Tuxpan y el propuesto Gasoducto Puerta al Sureste constituyen factores de riesgo para el Corredor Arrecifal. La campaña #Arrecifes del Golfo: Cuna de Mar se enfoca en evidenciar que sin los arrecifes simplemente se perdería la soberanía alimentaria de muchas comunidades pesqueras y no existirían actividades económicas preponderantes para el estado de Veracruz como la pesca y la actividad turística. También se perdería la riqueza gastronómica y otros elementos de la diversidad cultural veracruzana como con su música, historias y artesanías. “La mar”, como le dicen en muchas comunidades pesqueras, es sustento de vida y parte integral de su identidad y proyecto de vida. Sin los arrecifes, en donde habitan y se reproducen una gran cantidad de peces, no podrían seguir siendo quienes son. En los últimos años, se han realizado importantes descubrimientos de arrecifes sumergidos que hasta hace poco eran desconocidos para la ciencia. En la región norte —entre Tamiahua y el río Tecolutla—, por ejemplo, se encontraron los mayores arrecifes sumergidos de todo el suroeste del Golfo de México. La investigación también arrojó que el impacto de la actividad humana sobre estos ambientes es severo, pues la mayor parte de los sitios descubiertos resienten el incremento de las tasas de sedimentación y la mala calidad del agua, así como las afectaciones de la industria de hidrocarburos, el tráfico marítimo y la intensidad de las actividades pesqueras. Asimismo, la industria de los hidrocarburos representa una seria amenaza para la viabilidad ambiental de estos arrecifes. Una gran parte de la zona norte y sur del Corredor Arrecifal tienen áreas contractuales y asignaciones para la exploración y explotación petrolera. Del mismo modo, megaproyectos como el propuesto gasoducto Puerta al Sureste ignoran la presencia de estos ecosistemas y su importancia biocultural en sus evaluaciones de impacto ambiental. En términos de protección, con excepción de los arrecifes del Sistema Arrecifal Lobos Tuxpan y del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano, el resto de los arrecifes están totalmente desprotegidos por la Comisión de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y por otras autoridades ambientales. Incluso, las Zonas de Salvaguarda, establecidas en la Ley de Hidrocarburos para la protección de estos ecosistemas , abarcan solamente una parte de ellos y no consideran su interconexión con el Corredor Arrecifal. En vista de las amenazas graves al Corredor Arrecifal y a los proyectos de vida de las comunidades pesqueras, y la poca visibilidad que se ha dado a la importancia biocultural de estos ecosistemas del Golfo de México, se conformó la Red Corredor Arrecifal del Golfo de México como una alianza entre cooperativas pesqueras, personas pescadoras, organizaciones de la sociedad civil, la academia, artistas y comunicadores. La campaña #ArrecifesdelGolfo: Cuna del mar hace un llamado a conocer y difundir la importancia biocultural del Golfo de México, así como a sumarse al cuidado y la protección de este tesoro oculto ante las actividades humanas nocivas y los impactos de la crisis climática.   Organizaciones integrantes de la red: Centro Mexicano de Derecho Ambiental, A.C. Espora Media A.C. Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA) Gente Sustentable A.C. Territorios Diversos para la Vida, A.C. Senderos y Encuentros para un Desarrollo Autónomo Sustentable (Sendas), A.C. Contacto de prensa: Víctor Quintanilla, AIDA, [email protected], 5570522107  

Leer más

Embarcaciones pesqueras en el Puerto de Veracruz, México
Océanos

El arrecife veracruzano y la oportunidad de cambiar la realidad

Texto publicado originalmente en Animal Político.   El arrecife veracruzano o Sistema Arrecifal Veracruzano —el más grande del Golfo de México— es protagonista de la historia y cultura del país. Este sitio de anidación de peces y larvas sirve de barrera protectora contra tormentas y huracanes, constituye la fuente de subsistencia de cerca de 15,000 personas dedicadas a la pesca y atrae al turismo de buceo y snorkel, entre otros servicios ambientales. Ello motivó a dos personas residentes de Veracruz, representadas por el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, a presentar una demanda judicial para proteger su derecho humano al medio ambiente sano en 2016, argumentando que la evaluación de impacto ambiental fragmentada de la ampliación del puerto de Veracruz impedía conocer las afectaciones a los arrecifes coralinos del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano (PNSAV). Fue hasta febrero de 2022 cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó por unanimidad, en su sentencia 54/2021, que los permisos ambientales para el proyecto son ilegales. El fallo obliga a que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) evalúe de nuevo y exhaustivamente la totalidad de las obras que conlleva la ampliación portuaria, use la mejor información científica disponible e identifique los impactos de las obras en los ecosistemas de la zona. También ordena elaborar planes de restauración y requerir peritajes internacionales. En diciembre de 2022, en su oficio SRA/DGIRA/DG-06257-22, la SEMARNAT autorizó nuevamente la ampliación del puerto de Veracruz, haciendo caso omiso del criterio de la Suprema Corte; más grave aún, ignoró por completo las oportunidades de participación pública que dispone la propia legislación ambiental. En este sentido, parecería que la autoridad ambiental recopila las autorizaciones fragmentadas en una sola para “simular” un cumplimiento de la sentencia. En esta fase del proceso judicial, el Quinto Juzgado de Distrito del Séptimo Circuito –que está a cargo de determinar si la sentencia se cumplió o no– tiene la oportunidad de confirmar que la reciente autorización de impacto ambiental desacata los criterios establecidos por la Suprema Corte. El tribunal tiene en este momento la enorme responsabilidad de hacer que la sentencia 54/2021 transforme la realidad social y ambiental. De no ser así, permitiría que sea solamente una decisión judicial con estética argumentativa en papel. El fallo considera la posibilidad de requerir asistencia técnica internacional. En particular, el Secretariado de la Convención Ramsar —tratado intergubernamental para la protección de humedales de importancia internacional como el arrecife veracruzano— puede brindar apoyo especializado al gobierno mexicano para realizar esa evaluación de impacto ambiental, pero únicamente ante una solicitud específica de la propia autoridad ambiental. Esta petición gubernamental constituiría un buen gesto de la voluntad política para el cumplimiento de la sentencia en cita. En conclusión, el fallo histórico 54/2021 y su ejecución representan la gran oportunidad de México para generar un parteaguas en la evaluación de impacto ambiental y en la aplicación efectiva de la ley. En el marco del Día Mundial de los Océanos, la reflexión es que tanto las autoridades como la sociedad civil no nos conformemos con el consuelo de una sentencia protectora, sino que realmente actuemos en consecuencia para garantizar una protección real para los arrecifes coralinos de Veracruz.  

Leer más